Acerca de

Mi nombre es Victoria. Podría hablar de todas las etiquetas que me he puesto en esta vida, pero básicamente soy un espíritu encarnado que busca la expansión de la consciencia. Desde muy chica busco respuestas a preguntas como qué hago acá, de dónde vengo, por qué nací acá y no allá, cuál es mi propósito, etc. Si hoy miro hacia atrás, puedo reconocer que siempre tuve muchas señales en mi camino que no sabía interpretar en el momento, pero que hoy tienen todo el sentido.

Siempre me interesó comprender la energía, me era fácil sentirla, reconocerla. Los astros también siempre estuvieron ahí, recuerdo pedir un telescopio a los Reyes Magos para ver las estrellas de cerca, puesto que mi sueño de cada noche era volar por el universo. A los 12 años empecé a escuchar acerca de la Astrología y eso me fascinó; recuerdo que apenas apareció Internet, buscaba lo que significaba cada signo y me hacía notas intentando comprender algo para lo cual todavía no estaba lista.

A los 21 años me hice Reikista y sentí un salto hacia otra dimensión, todo lo que percibía de niña dejó de ser un sueño y se volvió parte de mi realidad, vi el mundo y la vida misma desde otra perspectiva, la conexión con el Todo era más que una fantasía…

Durante los años siguientes me dediqué a sentir y percibir, me volví nómada digital y comencé a viajar; la niñez que tuve me había ayudado mucho a potenciar la observación y la escucha flotante, y me fue fácil percibir a las personas. Comencé con la meditación, el yoga y el Ho’oponopono. Fue en esta etapa que descubrí la Biodescodificación que luego se transformaría en la Bioneuroemoción®, las cuales me enseñaron a comprender lo que mi cuerpo quería comunicarme, y así logré sanar varios síntomas que me acompañaron de manera recurrente durante años.

En los años en que viví en Brasil también estudié Chamanismo, el cual me regaló una conexión con la Madre Tierra que me emociona, y Espiritismo, que me respondió muchas preguntas que nada ni nadie había podido responderme hasta el momento. Luego de eso, cumplí otro sueño y fui a Tailandia a meditar con los monjes y experimentar en carne viva el Budismo y sus enseñanzas.

Siempre fui muy autodidacta, me encanta estudiar y mi buena lunita en géminis me acompaña en eso, junto con mi ascendente en Sagitario que me pide fervientemente experimentar el mundo, viajar, aprender para, finalmente, compartir. Y cuando llegué a Italia fue que mi conexión con la Astrología se hizo más fuerte. Durante ese tiempo estudié Astrosofía mientras que a la vez seguía estudiando por mi cuenta con videos de diversos astrólogos que llamaban mi atención.

En España completé el Máster en Bioneuroemoción®, me hice lectora de aura y me dediqué a estudiar la terapia floral, con lo cual sentí la maravillosa transmutación de la alquimia. Casi dos décadas habían pasado desde que inicié mi conexión con el todo cuando finalmente decidí que era hora de dedicarme a acompañar a las personas, y así fue que llegué hasta aquí.

Nunca había pensado en ser terapeuta, de hecho, todo lo que hice fue para mí y, por eso, sé que funciona, he experimentado cada una de las técnicas conmigo misma. Y no he dejado de estudiar, no creo que nunca lo haga, me considero un ser en constante expansión y mi intención es utilizar todos los recursos que voy adquiriendo a favor de mis consultantes, es lo que me propongo hacer...